Después de tantas suspensiones por las lluvias, por fin llego el primer torneo de Boligolf en Villa Tranquila. Ante la insistencia después de los chicos, este jueves a las 17 hs se largo el primer encuentro del torneo.
Primeramente se explicaron las reglas para llevar adelante el juego:
Quienes pueden participar:
Todos aquellos que tengan ganas de divertirse y pasar una buena tarde.
Como se juega:
los hoyos van del 1 al 10 y cada participante deberá ir embocando su bolita en cada hoyo en ese orden.
A su vez a cada participante se le darán 3 bolitas, que las utilizaran como vidas, perdiendo cada vida cuando otro participante lo chucee, o pegue a su bolita.
Cada participante tendrá un turno de tiro, pudiendo ayudarse pegándole a otro participante, el que le entregara la bolita como premio, y así lograra otro tiro, que terminara en el primer intento que erre a su objetivo ya sea otra bolita o un hoyo.
El desafío esta en quien logra terminar primero el recorrido de los 10 hoyos.
Una vez sacadas todas las dudas, se largo la inscripción, participaron alrededor de 15 niños, niñas y algunos mayores que tenían edades desde 30 hasta 5 años.
Luego del desafío, todos compartimos jugos y galletitas, los cuales fueron donados por la directora del CEF, Alejandra, a quien, dicho sea de paso, queremos agradecer por la invitación a la inauguración del CEF , por lo que pedimos disculpas por no poder asistir debido a inconvenientes personales, desde ya les auguramos los mejor al trabajo que ya están llevando adelante, sabemos que las instalaciones del CEF están en manos de personas totalmente comprometidas con la realidad del barrio y es por eso que queremos ofrecernos a difundir cada actividad que lleven adelante. Por otra parte los niños que asistieron a la inauguración nos dijeron que “estuvo muy buena” y estaban muy contentos con las actividades que realizan.
También queremos agradecer la colaboración del señor Carlos Baigorri que con su ayuda en dinero posibilito que llevemos adelante la actividad. ¡Gracias Carlos!
El torneo fue llevado con mucho entusiasmo y con atención de los participantes. Se fueron eliminando de a poco hasta que Agustín, de 9 años, logro terminar el recorrido, ganado una bolsita de bolitas especiales azules como trofeo.
A todos les agrado y ya quieren otro torneo, que les avisamos que llevaremos adelante luego de los talleres de barriletes, para poder remontarlos el 16/10 en la jornada barrial. (punto aparte re aparte, punto re parte)
Pido permiso para que me acerquen el banquito. Pido permiso por que este banquito no mio y no es de nadie, es como el asiento de un colectivo, ninguno es dueño del mismo y sentimos que cualquiera que vaya en ese viaje tiene la oportunidad de sentarse o de darle la posibilidad de que se siente otra persona, por que es una manera de decirle, te estoy mirando y veo que tenes trabajo, tenes futuro o es una forma de agradecer la sabiduria que nos brinda. Y todos lo sentimos así, por eso sancionamos a aquel que se hace el dormido solo para no pararse junto a nosotros.
Lo pido para dedicar esta actividad a María Gabriela iglesias, que cada día nos abraza tan fuerte provocando que nos llegue mas oxigeno al cerebro, ya que no solo nos cuida siempre nos propone pensar y nos escucha.
A Carlos que con su ejemplo nos demuestra que existe las el trabajo desinteresado y no por ello deja de ser de excelencia.
A la madures de esther que siempre tiene la palabra justa para compartir con nosotros.
Un gran mensaje para la gran Adriana, que no se bajonee y levante, que no crea en la autoridad de aquel que nos estafo, ese que en su realidad en su mundo cree que todavía existen los designios divinos de autoridad, y así cada día se aleja mas del mundo de la gente que siente y tiene moral, en donde impera las conciencias, esa que en nuestra personas esta muy tranquila y no los reclama nada, porque ninguno de nosotros se quedo con aquello que no es nuestro, por que lo nuestro se puede ver cada día en el saludo y la confianza de la gente en el trabajo que ven en estas paginas.
Y un fuerte abrazo para los demás que al igual que yo comparten la riqueza de tener palabra.
Ahora si pido permiso para bajarme del banquito para darle la posibilidad a otro que pueda expresar sus ideas, que pueda exponer sus palabras, por que ese banquito solo es una circunstancia en el tiempo, por eso jamás hay que olvidarse que hubo personas que me acercaron a esa circunstancia, que a pesar de merecer ese lugar por su trabajo, por su sabiduría, por su futuro, me dieron la oportunidad de poder usar el banquito.
Y me bajo con la intención de seguir un camino, que me lo marca la única mano con autoridad para conducirme, la mano de Lorena.
